El coleccionista de arte alemán, Cornelius Gurlitt, cuya colección de obras condujo a una investigación sobre el arte robado por los nazis, falleció este martes en su apartamento de Munich a los 81 años.
Gurlitt era el hijo de un distribuidor que compró y vendió arte durante el régimen nazi, incluyendo obras saqueadas en casas judías y otras que fueron compradas a propietarios judíos bajo coacción.
Después de que las autoridades alemanas confiscaran su colección de más de 1.500 obras el año pasado, sus abogados aceptaron que la propiedad de algunas podía estar en duda.
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